ECO-ECONOMÍA

ECO-ECONOMÍA
La construcción de una economía para el Planeta. Lester R. Brown

(Análisis Crítico)

Autores:

Andrés Chacón Ortiz; Beatriz Ramírez; Portillo Edixon; Vazquez Yvanosky

 

ECOECONOMÍA:

El fundamento de la Ecoeconomía se basa en el hecho que la ciencia económica evoluciona de forma unísona con el cumplimiento de los principios fundamentales de la ecología. Al respecto, la ecoeconomía constituye una corriente del pensamiento económico que busca dar respuesta teórica a problemas reales que, razonablemente aborda una justa crítica a la economía clásica, promoviendo la construcción de un nuevo paradigma de modelo de desarrollo y bienestar humano.

A pesar de los avances tecnológicos que experimenta actualmente la humanidad, los economistas no han logrado explicar cómo la economía pone en peligro y destruye los sistemas naturales de la Tierra, a pesar de que, la ciencia económica es primordial para medir los costos que estos excesos tienen para la sociedad. La economía es fuente generadora de destrucción de los sistemas naturales de la Tierra, creándose una tensa relación entre desarrollo económico y ecosistemas terrestres, trayendo como consecuencia una creciente pérdida económica.

En tal sentido, nuestra generación se enfrenta a un gran reto para revertir las tendencias del deterioro ambiental, evitando el colapso económico de la humanidad. Es por ello, que la ecoeconomía, o también denominada economía sostenible desde un punto de vista ambiental, demanda que los principios de la ecología sean fundamentales para la formulación de políticas económicas, y que los economistas y ecologistas trabajen conjuntamente para moldear la nueva economía.

Planteamiento

Actualmente, la economía se ha caracterizado por tener un respaldo en base a las leyes del mercado y la ineludible globalización. Los resultados de este proceso económico crean una gran distorsión que conlleva a estar fuera de sintonía con el ambiente. Este proceso crea un círculo vicioso ya que, en aras de un mayor desarrollo económico, se explota y destruye el ambiente como fuente de recursos naturales para fomentar dicho mal llamado progreso económico.

Objetivos del Tema Analizado

·            Definir un marco conceptual armónico entre economía y ecología, donde se constituya la ecoeconomía como un modelo sostenible desde el punto de vista ambiental.

·            Reconocer que la economía es parte del ecosistema Terrestre, y que puede sostener el progreso sólo sí es reestructurada de manera compatible con los principios de la conservación.

·            Definir nuevos conceptos económicos que permitan un entendimiento ecoeconómico de los problemas ambientales.

·            Establecer el costo ambiental de las actividades generadoras del progreso económico.

DESCRIPCIÓN Y ANÁLISIS CRÍTICO DEL CONTENIDO

Según los economistas la economía de un país se basa en distinguir entre Producto Interno Bruto y el Producto Nacional Neto, siendo la diferencia entre estos que , en el segundo se descuenta el valor estimado del desgaste, la depreciación de las máquinas, los edificios, herramientas de trabajo, y se supone de forma implícita que la única condición para mantener el nivel de producción indefinidamente es hacer frente a esta depreciación, con lo cual se fija como posición que si la inversión bruta supera la depreciación, la producción crecerá pero, ¿qué sucede entonces con la Naturaleza? , pues si la economía clásica supone que el flujo de recursos naturales está asegurado y que es un recurso "libre", curioso supuesto cuando se explotan recursos cuando su potencial cantidad es finita, aunque esto no debe extrañar pues ningún manual de crecimiento económico escribe sobre energía o recursos naturales.

Críticas a la ecoeconomía

La ecoeconomía aparentemente es llamativa conceptualmente, pero hablar de capitalismo verde no es más que una combinación de expresiones opuestas, ya que si no se cambian las bases de funcionamiento del capitalismo, de la producción y del consumo, no se pueden acometer los cambios estructurales necesarios para avanzar en esos valores que nos intentan implementar. Dentro de los aspectos positivos, los temas ambientales son obligatorios en las gestiones económicas, pero lamentablemente no se saldrá del manido esquema de que el "mercado" y las empresas salvarán el planeta, sustrayendo así la economía del mundo natural que la hace posible.

CONCLUSIONES

·            La vida en la tierra depende del poder armonizar a la economía y la ecología, donde se logre constituir a la ecoeconomía como un modelo sostenible desde el punto de vista ambiental sostenible.

·            El progreso debe estar de la mano con la educación en pro del reconocimiento de los ecosistemas Terrestres y así hacerlo compatible con los principios de la conservación, permitiendo un entendimiento ecoeconómico de los problemas ambientales.

·            Si no se establecen a corto y mediano plazo el coste ambiental de las actividades generadoras del progreso económico, la historia de la humanidad se convertirá en una carrera contra la catástrofe.

APRENDIZAJE Y ENSEÑANZA

Necesitamos que en la actualidad ocurra un cambio de paradigma de nuestra visión económica del mundo, sobre la base de varias décadas de observación y análisis ambientales; sobre la relación entre la tierra y la economía.

El reto de nuestra generación es el de revertir estas tendencias antes de que el deterioro ambiental conduzca al deterioro económico a largo plazo.

La transformación de una economía destructora del ambiente en una economía que pueda mantener el progreso, depende de un cambio de nuestra mentalidad económica de reconocer que la economía es parte del ecosistema del planeta.

La única formulación de la política económica en un mundo con un ecosistema compartido y una economía global en creciente integración, que tendrá éxito es aquella que respete los principios de la ecología.

La construcción de una ecoeconomía resulta emocionante y satisfactoria, significa que podemos vivir en un mundo ecológico en el que las ciudades estarían diseñadas para la gente y no para los automóviles. Y lo más importante de todo, construir una economía que mantenga y no quebrante a las generaciones futuras.